tag:blogger.com,1999:blog-19756199.post1708671484169448548..comments2024-01-23T09:42:29.447+01:00Comments on Campos de fresa: La lista de la compraAl59http://www.blogger.com/profile/03769167218404615705noreply@blogger.comBlogger4125tag:blogger.com,1999:blog-19756199.post-48072766014791979312013-12-24T12:54:22.079+01:002013-12-24T12:54:22.079+01:00Un gran abrazo, Antonio.Un gran abrazo, Antonio.Al59https://www.blogger.com/profile/03769167218404615705noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-19756199.post-16245993390103758432013-12-22T18:48:45.444+01:002013-12-22T18:48:45.444+01:00Soneto que disfruto y con el que (uno más) regreso...Soneto que disfruto y con el que (uno más) regreso a aquellos tiempos que, es muy posible, imprimieran carácter. <br /><br />Un abrazo a ambos. Antonio del Caminohttps://www.blogger.com/profile/10920467781285093668noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-19756199.post-24034549045385174362013-12-21T19:55:56.845+01:002013-12-21T19:55:56.845+01:00Yo también recuerdo con placer esos tiempos, en lo...Yo también recuerdo con placer esos tiempos, en los que adquirimos entre todos una soltura casi peligrosa, y a pesar de los estilos tan distantes y varios, vino a emerger una cierta manera conjunta de hacer, un registro peculiar que reconozco cuando me surge y que asocio de inmediato a aquel espíritu. Un gran abrazo, Alfredo.Al59https://www.blogger.com/profile/03769167218404615705noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-19756199.post-28503484747272309042013-12-21T13:13:57.505+01:002013-12-21T13:13:57.505+01:00Qué, en efecto, deliciosamente barroco. Y sabinian...Qué, en efecto, deliciosamente barroco. Y sabiniano (suena ahora mismo , ¿Jung mediante?, a mis espaldas, en la radio: «Tirso de Molina, Sol...»). Y alcincuentanónico (!). De pronto me parecía estar, sin dejar la fluidez del tiempo presente, entre las bambalinas dizque modernistas del foro de sonetos de poesia.com, ya va para diez o doce o trece años (qué bárbaro), donde era tan grato ir a los posteos de una mano de locos rimadores. En fin, parece mentira que ya las cosas mediadas por la red puedan segregar esa sustancia tan pegajosa que es la nostalgia. Qué se fizo. Pero es así. Será la Navidad. O, ay, los primeros síntomas de eso que el eufemismo llama la juventud de la vejez. En todo caso, me quedo con la línea final: «el vértigo al que nunca se renuncia». Un abrazo, inevitablemente navideño, amigo.Alfredo J Ramoshttps://www.blogger.com/profile/12290177228912698417noreply@blogger.com