Muy justita me la tienen las circunstancias, con cursillos y otras cucadas que me roban ese rato sin condiciones ni garantías del que, a veces, sale algo. Hoy esos minutos, que han vuelto a aparecer, se me han ido disfrutando de esta música, que he adorado siempre, y redescubro ahora en convincente directo. Vini Reilly, el guitarrista de Durutti Column, explicaba que él tomó en serio el slogan de finales de los 70 que invitaba a hacer lo que quisieras (y supieras), sin la menor consideración con el comercio. Así que comenzó evitándose (y evitándonos) la sumisión a las nuevas convenciones dictadas por Sex Pistols y The Clash, y explorando en cambio una suerte de neoimpresionismo minimalista, que a ratos suena a lo que Mike Oldfield podría haber logrado si en vez de agostarse en los 80 hubiera seguido creciendo. Hay algo, además, de España (ese animal mitológico) en el bramido de los metales.
4 comentarios:
Interesantísimo el tío Vini y muy buena recuperación la del 'Without mercy', Alejandro. Aunque también aprecio a los que has citado (aunque yo soy más del post-punk que del punk, es decir, de Joy Division, The Cure o Birthday Party), Durutti Column siempre me ha parecido un proyecto fascinante en sus líneas musicales y vocales de languidez mortecina.
Mi canción favorita sería el 'Black horses'.
saludos
Gracias, Horrach. Buscaré esos caballos negros. Lo de Viviana, ¿qué le parece? ¿Mujer ctónica o más bien (por lógica *elemental*) hídrica?
Se parece a Cincotti...
La canción citada está en el disco 'Bread & circuses', de 1985.
No conocía la historia de Viviana (no estoy muy puesto en mitología). Yo más bien la calificaría de 'mujer mimética', pues ese deseo de suplantar mejorando a Merlín tiene mucho de esa dinámica deseante que nos lleva a movernos en base a modelos que, en un momento determinado de la secuencia mimética, devienen adversarios. Aunque, como mujer, algo de ctónico debe tener la chica, ¿no?, jajaja (para un servidor, toda mujer es ctónica si no demuestra lo contrario).
saludos
Publicar un comentario