martes, 28 de abril de 2009

La caja del alma


Marea de fantasmas: hay melodías, canciones, que me acompañan desde hace años pero nunca terminan de hallar su momento. Ésta es una de ellas: un juego sencillo para dos guitarras (o flauta y guitarra) que ha acabado exigiendo, en desagravio por la tardanza, bajo, sitar, harmonio y theremin. Todo invisible, fantasmal: música de autómatas que fluye en secreto, con los ojos cerrados. Pienso ahora que un poquito más rápido (sólo un poco) estaría mejor, pero ya no puedo con mi alma (si la tuviera). La guardo, pues, en la caja y enciendo el lector de sueños.


3 comentarios:

Joselu dijo...

Misteriosa.

Perroantonio dijo...

Estaría muy bien como banda sonora de imágenes nocturnas.

Al59 dijo...

Misteriosa y nocturna, sí. Gracias a ambos. Me ha gustado también el comentario de Hércor, donde los leones: que tiene la pieza un punto barroco, por el bajo continuo. Un crossover entre The Cure y el siglo XVII.