sábado, 2 de abril de 2011

Hojas de Twitter caídas (II)

En clase de literatura universal entramos en terrenos pantanosos: los de la novela realista del XIX. Terra, para mí, un tanto incógnita, aunque algo se puede decir por descarte. Hay una línea concisa que arranca de Súmer y los presocráticos -todo en casi nada. La gran novela va en dirección opuesta -lo que pueda decir importa poco. Lo que nos ofrece es instalarnos un mundo y habitarlo durante algún tiempo, una versión pionera de la realidad virtual que desborda lo sensible, incluyendo acceso a pensamientos y mareas íntimos. De ahí que leerla resumida, reducida a su anécdota, sea menos que nada.

En cuanto a la máxima concentrada, tras Gracián y Cioran desemboca hoy en Twitter. Sigo tanteando ese terreno -aquí va una segunda muestra.

.

Aquellos versos sin autor. 'Y nos hicimos bosques / para poder perdernos'.

.

Mallarmé: 'He leído todos los libros'. No digo tanto —pero qué pocos hay que no repitan, con mayor o menos fortuna, apuestas ya amortizadas.

.

Llegar tarde no es tan grave: supone que aún hay a dónde.

.

'Estar en lo cierto' le puede pasar a cualquiera, y a nada compromete. 'Tener razón' es otra historia.

.

Las palabras muerden, pero nunca ladran.

.

El que se busca a sí mismo ha olvidado de quién salió huyendo.

.

Para nosotros, la verdad será siempre algo verde, incipiente. Más que una vereda, un puente levadizo.

.

Lo mejor de la enseñanza es el concepto etimológico: el docente como hierofante que va quitándole velos a Ishtar.

.

Las cosas que parecen ciertas pueden serlo, pero mosquea el gasto extra. Lo que es no necesita aparentar.

.

Ahora que tantas cosas se van al carajo, asombra lo lograda que estaba la ilusión de permanencia.

.

Los que atacan la literatura escapista han olvidado que el deber de todo preso es huir. Al plano astral, si es preciso.

.

Vaya. La literatura rusa es de tal magnitud que las autoridades se sienten incapaces de impartirla.

.

Tristan Tzara: 'Sólo el contraste nos enlaza con el pasado'.

6 comentarios:

Joselu dijo...

La deriva de nuestras mentes -al menos de la mía- lleva a la condensación aforística y en este sentido Twitter representa la esencia de una forma de contemplar el mundo y la vida. He sido un entusiasta de la novela del siglo XIX. La leí durante años. Sin embargo, me descubro transformado por acción de internet y twitter y también mi iPad. No soporto los desarrollos largos, la ficción me cansa, quiero realidad, pensamientos concentrados, enlaces, ir saltando de aquí para allá. Mi realidad como lector se ha visto profundamente transformada. No leo como antes, y no es que lea menos. En conjunto creo que leo más pero todo es rabiosa actualidad, las tramas del pasado me sobrepasan. No me gusta esta deriva. Pienso en lo que pueden estar pasando mis alumnos intentándose leer Cinco horas con Mario para el examen del jueves próximo. No se lo leerán. Pero les entiendo. Esto no se lo puedo decir a ellos. No es buen tiempo para una determinada concepción de la literatura. Intentaré volver a Ciorán a ver si me capta.

Saludos. Tomo nota de tus interesantes tuits.

Juan Poz dijo...

"El que se busca a sí mismo ha olvidado de quién salió huyendo". ¡Buenísimo!. ¡Excepcional!, incluso. Nunca me he asomado a twitter. A mí me siguen gustando los desarrollos largos, y soy de los que lamentan que un buen texto tenga las páginas contadas... Son resabios de tostonero viejo, lo sé, e incluso frecuento el aforismo, pero me priva un buen desarrollo argumental extenso...
¿Se puede saber el autor de esa maravilla de afoorismo, tan bergaminiano?

Al59 dijo...

Son ocurrencias mías, Juan (si es que cabe ese oxímoron).

Anónimo dijo...

Ya me parecía a mí que había demasiadas perlas para no ser cultivadas.

Gharghi.

Al59 dijo...

Gracias, hombre. Lo curioso es que nunca me había dado por escribir aforismos de éstos, hasta que Twitter me ha invitado a ello. La necesidad crea el órgano, o la posibilidad se hace inevitable.

Juan Poz dijo...

Ignoraba que anduvieras por esos andurriales estrechos. En cualquier caso, quedo exculpado de "peloteo" y me reafirmo en mi juicio. Más que antes, aún: ¡enhorabuena! Me trajo a la memoria otro de Bergamín: "Buscar las raíces de identidad es una manera suterránea de andarse por las ramas". Menos mal que, de vez en cuando te acuerdas de colgarlos aquí, para los fieles.