domingo, 11 de diciembre de 2005

El Titán desdentado




Miguel Bakunin, anarquista, poeta. «El deseo de destruir es al mismo tiempo un deseo creador». Antes que Marinetti o Tzara, cuando aún era verdad. Otro empellón: «El hombre puede vivir: todo, cada momento de su vida es grande, verdadero y sagrado. Hay que buscar el infinito en todos los puntos». Puertas abiertas al campo: las de Blake o Jim Morrison. Breton: «Todos estamos hambrientos de infinito».

Fue, felizmente, intolerante: nunca soportó que se hicieran malos poemas, relatos u obras de teatro alegando buena fe revolucionaria.

Bakunin sufrió prisión en tres países distintos y durante su cautiverio contrajo el escorbuto, enfermedad que le hizo perder casi todos sus dientes. Para aliviarse del dolor, aun sin tener acceso a papel y tinta, inventó borgianamente una obra de teatro que hacía y rehacía en su cabeza. Un amigo suyo recuerda:

«El tema era Prometeo, a quien la Autoridad y la Violencia habían encadenado en un pico rocoso por haber desobedecido al déspota del Olimpo, y al que las Ninfas del Océano iban a consolar. Y con su voz gastada nos cantó una melopea compuesta por él mismo, con la que las ninfas reducían los sufrimientos del Titán cautivo.»

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Oye, a mí también me gusta Bergia. Muy interesante lo de bakunin, pero por Dios, no pongas en el mismo plano a Blake y a Morrison! Estos rockeros...

Juan Poz dijo...

Amigo Alejandro, le devuelvo la visita por cortesía y por interés, porque su biografía permite esperar grandes cosas en este blog. No indica si los "hecho" -de lo que saca pecho- está publicado o editado en algún sitio. Me interesarían las referencias biblio o discográficas para las oportunas compras navideñas..
Sin duda Bakunin tenía a Prometeo en la cabeza, pero yo lo tuve, cuando era bachiller, en los genitales. Recordará Vd. sin duda el famoso diccionario de latín-español Spes, ¿no? Bien, pues si se va a la página 404 verá una ilustración de Prometeo y el buitre que le devora el hígado... ¡Ni se sabe la de veces que me masturbé contemplando esa ilustración! Para mí, tan absolutamente ignorante entonces como lo sigo siendo hoy, Prometeo era Prometea, claro, y la visión de ese buitre ocupado en los dos puntos erógenos claves a la vez, gozando de ambos, me excitaba hasta el delirio... ¡Y luego dicen que el latín y el griego no son asignaturas útiles...!
Bienvenido, pues, a la blogosfera.

Al59 dijo...

Estimado Me pone: La continuidad Blake - Morrison es indudable (con Las puertas de la percepción de Huxley como eslabón oculto). A mí Blake me parece un poeta muy pop, muy psicodélico, con sus nupcias de cielo e infierno y su mitología casera. Celebro lo de Bergia. ¿No le parece una lástima que un genio así malgaste su talento dando cuerda y empaque a las obviedades de Ismael Serrano?

Al59 dijo...

Juanpoz: gracias por la bienvenida. Creo que de lo mentado lo único fácilmente localizable es la traducción que acaba de salir de [i]Las aventuras de Tom Bombadil[/i], de Tolkien. Es un empeño colectivo curioso, algo emborronado al final por un corrector editorial bobo, pero aun así interesante (espero).
El disco de Ciento Volando puede adquirirse (sólo) en la página del grupo, http://personal.telefonica.terra.es/web/nosfe/index.htm —aunque hay quien jura haberlo visto (el disco oficial y maquetas posteriores, que a mí me gustan más) en la entrañable Mula Mágica. El libro de cuentos lo publicó la Universidad Complutense, en edición no venal, así que no se distribuye ni mucho ni poco. Quizá me anime a rescatar los que han envejecido mejor y subirlos a la Red, por si colean.

Anónimo dijo...

No sabía yo esto (ni sé mucho más) de Bakunin... curioso lo de las obras no escritas qeu nos llegan de oídas, de lo que nos cuentan otros que les contaron quienes querían escribirlas. Siempre me interesó lo qeu se ha perdido por no llegar a escribirse, aun cuando mucho de lo escrito de esos autores no lo conozca. Es el caso de Lorca, no sólo con lo qeu conocemos que dejó a medias y ha ido apareciendo, sino con La destrucción de Sodoma que parece que tenía escrito y desapareció. Hasta de Michael Ende se ha publicado el cuaderno de apuntes, con algún hallazgo interesantísimo. ¿Alguien conoce alguna historia perdida más?
Enhorabuena, Alejandro. Que este blog impida pérdidas como las referidas y podamos leerte en toda la variedad siempre interesante que ofreces.
Me encanta lo publicado hasta ahora, un formato cómodo y una extensión muy adecuada, perfecta para seguir debatiendo aquí y extenderse ya más si se requiere...
Un abrazo

Al59 dijo...

Bienhallado, Rodomonte. Tolkien dejó muchas cosas así. Por ejemplo, aquello de los gatos de la reina Berúthiel. La obra de teatro de Lorca sobre Lot y sus hijas es sin duda una gran pérdida. De paso, creo que es un hilo (y no el único) que lo liga con los decadentistas y simbolistas, que también se sintieron fascinados por la historia. Lorca es uno de nuestros últimos mitófilos, ¿no?