sábado, 30 de diciembre de 2006

Instrumentales V: La Ciudad Sumergida


Cierro la serie con este título, fetiche de los decadentistas y crepusculares que en el mundo han sido. Grabación precaria: más de lo normal. Aunque la idea original es mía, mi pasaje favorito es esa introducción a dos voces que Daniel, el flautista, inventó a última hora.






3 comentarios:

Anónimo dijo...

NO me parece tan mala la grabación de esta pieza. Al contrario: suena con perfecta claridad. Flauta y guitarra (española) no son difíciles de grabar tal cual. Y la pieza es de melodía y armonía fascinantes y escurridizas. La flauta lo borda. Y la introducción a dos flautas es una delicia de ambiguedad armónica.
La única pega, que suelo poner con frecuencia, es accidental a la obra: tendríais que ser bien conocidos, valorados y pagados (como para poderse dedicar únicamente a ello) para tener tiempo, todo el tiempo, para ensayar y templar los instrumentos de metal, como esa flauta que, en las primeras notas de las grabaciones caseras, demuestra, con sus leves fluctuaciones tonales, que la sociedad no os conoce, no os valora (aún); y no os deja mucho tiempo para vuestros ejercicios. Ella se lo pierde. Al menos, quedan estas grabaciones.
Insisto sobre las pequeñas imperfecciones de las mismas tratando de advertir al oyente de que la obra no es así ni vosotros la habéis concebido con tal o cual defectillo; se debe a los apuros de la vida práctica, algo que se entiende bien.
Por lo demás, quien tenga oído y sensibilidad os reconocerá en grabación casera o de estudio sin problemas.
Saludos.

Grifo

Anónimo dijo...

"¿Sigue reuniéndolos algún espacio o se han dispersado por el ciberespacio?" ---Al

Pues sí, nos reunimos en un nuevo foro muy culto, pero me han pedido todos que no le dé la dirección. (Que nooo...) Andamos más desperdigados que patos cluecos en cal viva.

Usted siga con lo suyo, que si no es por el lado de la música o la poesía, por la sicodelia siempre podré entrarle, aunque sea para demostrar que donde esté el anís, que se quiten los peyotes.

E.M.

Anónimo dijo...

lo que yo queria, gracias