jueves, 5 de julio de 2007

El tonto de la colina


(Vade retro, Quintero.)

Falta el perro: y por esas viñas verdes saltaba yo con mi perro, / alegres como las nubes, como los vientos, lijeros, / creyendo que el horizonte era la raya del término. Por lo demás, McCartney hace un niñodiós perfecto, uno de los arcanos más notables de la mitología pop. La inspiración inmediata es confusa: acaso el Maharishi, tonto sagrado, o un misterioso hombre de mediana edad con el que Macca y Alistair Taylor (que no Crowley) toparon mientras paseaban por una colina, y que apareció y desapareció de forma misteriosa. Allan W. Pollack hace, como suele, un comentario magistral sobre la canción: como bien observa, el cambio a menor del estribillo produce un cambio súbito de atmósfera, como si el sol se ocultara tras las nubes en un día de luz espléndida.







2 comentarios:

Anónimo dijo...

Sólo un comentario sobre la iconografía de este naipe, el Loco o Vagabundo, etc...
En el post pasado de: lunes, julio 02, 2007, aparece una de las más antiguas versiones del ikono; y de las tenidas por más auténticas (o fieles a una -¿qué?- fuente).
Y no hay perro. Al vagabundo lo acosa un gato (creo haber visto versiones antiguas de gatos atigrados). También en la última, de hoy, un Tarot moderno, reaparece el gato original.
La sociedad medieval interpretó rápidamente este animal como 'perro'. Y así lo pintó El Bosco en una reproducción maestra.
Es lógico: en nuestra sociedad, sólo el perro, y difícilmente un gato, actúa como guardián y ataca a los intrusos.
¿De dónde la costumbre del gato guardián...?
Saludos.

Grifo

Al59 dijo...

Curioso. En dos de los naipes más antiguos que se conservan (de barajas de los siglos XV y XVI), el animal que ataca al personaje es ...un enjambre de niños diminutos. En una representación aún más antigua del personaje del Loco, del siglo XIII, éste lleva a un niño a sus espaldas (aclaremos que no se trata de un Tarot, sino de la ilustración de un códice).

Gatos guardianes sólo me suenan de las novelas de Lobsang Rampa. ¿Era guardián del hogar el gato egipcio? (Desde luego, su equivalente griego, la comadreja, lo era.)