Decía Antonio que cuando un poeta de vanguardia compone un soneto, la convención que acepta nos permite apreciar mejor su originalidad. Si uno ha acabado teniendo un estilo, eso que llaman un mundo propio, se aprecia aunque se atenga a una forma de expresión mil veces trillada: do mayor, la menor, 4x4. Por eso, o porque ha salido así, he compuesto esta tarde esta pieza, que se restringe a las notas blancas del piano, sin otro viraje que el que va de subdominante a tónica, y me suena, por eso mismo (o a pesar de eso), de lo más cientovolandera & alejandrina. ¿Le hubiera gustado? Quiero pensar que sí.
Los instrumentos: clave, piano eléctrico y cello.
5 comentarios:
Hermosa melodía AL, tiene ecos de Brian Eno y "Música privada". Yo he terminado el punteo,lo más parecido a la obra de el Escorial en mucho tiempo. Ahora grabarlo y te lo mando.
Un abrazo.
D.
Hermosa artesanía la de los melodistas. ESpero con impaciencia ese solo labrado nota a nota. Como debe ser.
Espero poder oir la conjunción de la melodía con el punteo. Don grandes músicos trabajando juntos una vez mas.
Es curioso cómo todas las influencias, nobles y no tanto, se van haciendo sentir (y combinándose de forma impredecible). El comienzo de ésta me suena a Nacho Cano (y a las canciones del verano de los 70). En las del ciclo lunar (Luna Plena I y II, pronto la III) oigo a Satie, pero también a los de Canterbury. Como escribió Antonio Vega, 'aprender a qué colegio fui'.
Tú que nos quieres, Gharghi :)
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