jueves, 30 de noviembre de 2006

Duermevela


1992 sería cuando por primera y última vez los Ciento Volando participamos en un concurso de maquetas. Lo organizaba la revista Rock de Luxe (o Rock Especial, o Espezial, o algo así) y lo ganó (no lo sé, pero lo sé) algún grupo guitarrero y violento, seguramente anglófono. No sé qué perfidia nos hizo elegir de la decena de temas que tendríamos grabados por entonces, alguno bastante pop, esta rareza melódica de cuatro minutos largos, para teclado (de curioso registro), efectos de sonido, guitarra acústica y voz juvenil, pero aun así reprensible. Obviamente, por mucho que hablaran en las bases de originalidad, ni entonces ni nunca iba a ser esto lo que los rockistas buscaban —pero algún rato divertido sí pasé imaginando su repelús (de luxe) al dejar correr el primer minuto impopular de este Nada. Las culpas (composición, voz y solo irrestricto) me tocan casi todas. Sigo sin saber qué tipo de música es ésta, de modo medieval y extrañas modulaciones—pero su ronroneo me sigue arrastrando.


NADA

Nada
queda en pie,
ya nada,
casi apenas
nada más.

Nada
de lo que yo
amaba
queda en pie, ya
nada más.

Todo aquello
que yo quise
va tomando
tonos grises.

Sales del mar muerto
con guirnaldas de color,
flota en derredor
de tus ojos
como pozos
de tiniebla
y poco a poco ya,
ya no me queda nada,
la espuma de mi almohada
y una mañana más.






(Nada por aquí, nada por allá).


6 comentarios:

Anónimo dijo...

Los grupos que pueden participar en festivales así no suelen tener mucha idea y se limitan a los cuatro acordes. Imagino la impresión que les producirían los cromatismos de esta canción y su compleja armonía que, no obstante, es la misma de que se sirvieron otros grupos que ellos también admiraban.

pepita pulgarcita dijo...

si te dijera que la primera vez que oí esta canción fue un poco a escondidas... Cuando mi hermana salió una tarde, entré en su habitación (lo confieso,me encanta cotillear, aunque luego nunca diga nada)y encontré una cinta pintada de azul, con los títulos escritos a boli. La puse y me quedé flipada, y lo sigo flipando. besos
(un pajarito me ha contado que has andado por el wikistrati)

Anónimo dijo...

Vaya edredón o colcha más fea.

Al59 dijo...

Jo, Incorrecto, qué comentario más fashion.

Al59 dijo...

Querido anónimo (¿Grifo?): por su distancia de los usos vigentes, algo tiene la cancioncilla de intemporal. Me gusta cómo fluye la melodía del órgano por todos los recovecos de la canción. No sé si es nostalgia, pero estos días me siento especialmente apegado a aquellas composiciones de los primeros años, tan experimentales desde el punto de vista armónico. Más de una vez pienso que para una oportunidad que tuvimos de grabar un disco, deberíamos haber apostado sin complejos por las canciones más raras (aunque las hay de dos acordes, como El limón, que también me gustan mucho).

Al59 dijo...

Pepita: estuve, sí señora. A ver si leo algo de Istrati, que desde luego invita. Me ha emocionado lo que me cuentas. Es como un atisbo de ese no sé qué por el que uno hace, brumosamente, las cosas.